El Aire es el soplo divino del Espíritu, la capacidad de moverse a través del espacio y el tiempo, y la sabiduría que viene de la experiencia y el estudio.
El aire es como una magia que se presta a manifestar cosas, por el aire viajan los sonidos, las imágenes, los estímulos. Mediante el aire podemos enviar mensajes, escribir historias, artículos, poesía, tomando notas, componer música…el aire representa el estudio, el aprender, la claridad de pensamiento, y la mágica trama del tiempo.
El aire es la suave brisa en tu cara que te hace sentir tocado y no tocado. Se cree que cobra vida y se mueve a través del espacio y el tiempo por el Divino.
El aire es la parte de tu mente que es clara y fuerte y concentrada y siempre cambiante, nunca quieta y no contenida, como cuando dejas ir en un suspiro parte de tus sentimientos y de tus pensamientos… mueves una energía invisible pero cierta a lo largo de la corriente del tiempo.
El Aire y sus correspondencias:
- Energía: masculino / proyectiva
- Dirección: Este
- Color: amarillo
- Elementales: sílfides y hadas
- Temporada: primavera
- Hora del día: amanecer
- Herramientas Ritual: varita, espada, daga.
- Tarot: Palo de espadas
- Ángel: Rafael
- Axioma hermético: «a voluntad»
- Zodiaco: Libra, Acuario, Géminis
El aire y su energía:
Cuando la energía de la Tierra envuelve, la energía del aire física es puramente mental. Abarca lo que no se ve, pero que nos hace quienes somos y da contenido a nuestra existencia – la inteligencia, la mentalidad, las ideas que conducen a la creatividad, nuestros supuestos, los pensamientos y la chispa del genio. Todo esto y más se deriva del elemento Aire.
Aire, el elemento, nos toca siempre que buscamos el conocimiento, buscamos respuestas, reflexionamos sobre el universo y nuestro lugar en él, al escribir, dibujar, pintar y componer. Debido al elemento del aire, dentro de toda la humanidad futura, residen novelas escritas, obras maestras pintadas, escultura, música, descubrimientos médicos, invenciones y creaciones que aún no han sido percibidas ni realizadas.
Esto se logrará cuando la danza de los elementos mezcle el aire con la tierra, todas estas cosas maravillosas se les dará un camino en el mundo físico, sucederán.
El aire y su uso en hechizos:
Tú puedes aprovechar el poder y el potencial del Aire cuando estás absorto en importantes esfuerzos mentales, como el estudiante que se prepara para dar pruebas: encender una vela amarilla en tu escritorio mientras estudias; meter una hierba alineada con la energía del aire en la parte posterior de tu libro; llevar consigo a tus exámenes una pequeña bolsa llena de piedras y hierbas correspondientes a la atmósfera, así como tus intenciones de una buena calificación. También lo puedes hacer para tu lugar de trabajo o para “oxigenar” una relación amorosa.
La energía del aire se utiliza en la comunicación, es la esencia de un pensamiento a otro, mente a mente. Puedes enviar un mensaje mágico mediante el aire, si haces el ritual de escribirlo en una hoja de papel y atarlo con una cinta amarilla de un árbol, el techo del porche posterior, un poste, etc, y dejarlo allí para que los vientos naturales del aire envíen este mensaje a su paso.
Al redactar, escribir, crear, encender tu incienso favorito para llenar tu espacio de trabajo con la energía del aire y atraer a tu musa para que se siente junto a ti y susurre a tu oído.
Si realizas hechizos o rituales con pentagramas, cada elemento tiene un dibujo específico tanto para INVOCAR los guardianes del punto cardinal que corresponde al elemento, como para luego DESTERRARLO una vez finalizado el ritual. En el caso concreto para el AIRE los pentagramas se dibujan así para invocación/Destierro:
Cuando uno se prepara un círculo mágico o un altar para lanzar hechizos o realizar rituales, Después de que el círculo o altar está hecho, tú irás a cada uno de los cuatro puntos cardinales (norte, este, sur y oeste) e invocarás los Guardianes de las Atalayas – es decir, los seres elementales conectados a los cuatro puntos cardinales y los cuatro elementos. Están llamados a presenciar el rito y para proteger tu círculo, de energías malévolas no deseadas.
En el caso de trabajar con el aire solamente, sin la presencia de los otros elementos, debes invocar al Guardián del Este de la siguiente manera:
«Saludo a los Guardianes de la Atalaya del Este. Por el poder del aire, yo convoco y los invoco para presenciar este rito y proteger este círculo.»
(Con tu dedo, dibujar en el aire un pentagrama invocando para el elemento de AIRE (según el dibujo anterior y la luz de una vela amarilla elemental, colocándola en la dirección (portal) Este.)
Cuando el ritual se ha completado y los conjuros se lanzan, es el momento para agradecer a estos seres elementales para presenciar el rito y por la protección que te han dado durante tu lanzamiento de hechizos. Tratar estos seres correctamente y con el respeto con el que se deben, nunca subestimes el poder que tienen, ignorarlos o destratarlos nunca será bueno para ti.
Agradeces y los destierras a los Guardianes del Este así:
«Les doy gracias, Guardianes de la Puerta del Aire, para presenciar este rito y proteger este círculo. Que su vuelo de regreso los lleve sanos y a salvo. Bendecidos sean!»
(Con tu dedo, dibuja un pentagrama para desterrar el elemento del aire en el aire y apagar la vela de color amarillo.)
Esto es el correcto proceder para trabajar con hechizos y rituales que involucren el AIRE como poder. Cada vez que haces un pedido, un ritual, un hechizo, por sencillo que sea, debes cumplir con estos procedimientos para lograr la ayuda de las fuerzas divinas y darle a tu acción un poder único, logrando cumplir mucho más fácilmente lo que estás pidiendo.